
Durante un tiempo muchos hemos decidido emprender nuestro propio negocio, buscando cómo satisfacer las necesidades de otras personas. Dedicando nuestro tiempo y dinero para conocer más del sector que vamos atender. Como emprendedor que eres, aplicar las fases de un emprendimiento te ayudarán a cimentar tu negocio.
Al iniciar, tendrás que afrontar muchas situaciones desconocidas, que te abrumarán en el intento de hacer rodar tus ideas. Además, al ir pasando por estas fases tu experiencia seguirá aumentando y la influencia que ejerces en el sector empresarial será mayor. Te animamos a poner en práctica estas fases y así alcanzar el éxito que te mereces.
Descubre las fases de un emprendimiento
Es fundamental que entiendas las fases o etapas de emprendimiento, esto te dará una ventaja al momento de iniciar tu propio negocio. Para que sea un poco más sencillo, te ayudaremos a descubrir las fases de un emprendimiento.
Primera Fase: La idea
Para iniciar tu negocio deberás desarrollar competencias o aptitudes para emprender. Entre ellas, un conocimiento amplio de las necesidades y productos que tiene el sector que vas a impulsar. Al tener un mapa completo podrás probar tus ideas hablando con tus potenciales clientes a satisfacer. Cuando organizas tus ideas das paso a la siguiente fase.
Segunda Fase: Modelo de negocio
En esta fase desarrollarás un modelo de negocio donde el prototipo de tu producto o servicio sea probado en el mercado. El conocimiento y las habilidades técnicas que hayas aprendido te serán de mucha utilidad en esta fase, ya que lo que pretendes es poner en marcha tu propio modelo de negocio.
Tercera fase: Inicio en el mercado
Para que tu negocio empiece a escalar posiciones en el mercado, es vital tener un buen capital; así como tener un perfil de tus potenciales clientes, esto te mostrará el alcance que puede tener tu producto o servicio en el sector a abarcar. En esta fase debes empezar a vender, es importante que tengas control de tus proveedores.
Cuarta fase: Escalamiento y consolidación
Cuando notes que tu negocio está creciendo en ventas, y consolidándose en el mercado, entonces estás en la cuarta fase. Notarás que tus productos o servicios se posicionan más alto que el de tus competidores. Con esta información respaldarás tu modelo de negocio y crearás oportunidades a las que otros no llegarán.
Quinta fase: Óptimo funcionamiento
En esta fase las ventas se encuentran en un crecimiento favorable para tu empresa, están en constante aumento. Aquí es donde deberás crear un organigrama de funciones que te permitirá delegar en tu equipo mayores responsabilidades. Con ello, generarás confianza en ti como líder de equipo.
Sexta fase: La expansión
Si hay crecimiento en ventas y mayor cantidad de clientes, entonces lo lógico es pensar en la ampliación de tu mercado. Ya sabes cómo hacerlo y los recursos que necesitas. Como en esta fase es fundamental el financiamiento, quizás pienses en pedir un préstamo a alguna entidad bancaria.
Consideraciones finales
Pasar por cada una de estas etapas es tener el éxito asegurado. Tu negocio estará destinado a ocupar un lugar importante en el mercado. Así que, es importante mantener el enfoque en cada etapa, realizando las tareas que correspondan a cada una de ellas. Por último, no dejes que tu empresa se estanque, siempre sigue avanzando, innovando.