
Todas las organizaciones están conformadas por un riguroso equipo de trabajo que está siempre atento a el buen funcionamiento de la empresa; dentro de este equipo de trabajo se encuentra el cliente interno, el cual es una persona que tiene alguna relación con su compañía y puede formar parte de esta desde distintas posiciones laborales.
¿A qué le conoce como cliente interno?
Un cliente interno es un individuo que tiene alguna relación con la compañía en donde trabaja, y al ser cliente interno puede elegir si comprar o no el producto de dicha compañía; por lo general el cliente interno es una persona que trabaja dentro de la empresa y puede ser un empleado o un gerente.
Los clientes internos no necesariamente deben ser directamente internos de una empresa, pueden asociarse a otras compañías con la finalidad de entregar el producto a los clientes externos; Todos los internos participan siempre en la entrega de un producto a los clientes externos, los miembros de la compañía como la junta de socios y/o accionistas también son clientes internos; solo que estos son clientes internos muy importantes por la suma de capital que invierten en la compañía.
En otras palabras, este tipo de cliente es solo un elemento dentro de una empresa que obtiene el resultado o el producto de algún proceso para luego realizar su propio proceso; después de haber realizado su propio proceso, dicho cliente entrega el resultado a otros trabajadores de la compañía para que continúe con el proceso hasta que este esté terminado y listo para salir a la venta y lo compre un cliente externo; debido a esto cada trabajador de una empresa es un cliente interno y al mismo tiempo un proveedor.
Tipos de clientes
Existen tres tipos de clientes internos.
Ejecutivo: Este posee la relación más cercana con los usuarios finales (clientes externos); los ejecutivos se encargan de decidir qué producto o servicio se va a ofrecer y a qué mercado ira dirigido.
Comercial: Este mantiene una relación directa con los diferentes grupos de trabajadores que conforman una empresa, gracias a esto tiende a tener una visión más clara de la calidad.
Operativo: Estos se encargan de la elaboración de los productos dentro de la compañía.
Una de las funciones del cliente interno es tener información que le permita entender el trabajo que se debe llevar a cabo desde su perspectiva, el punto de vista de la empresa y el del cliente.
El cliente interno también debe conocer y observar la formación propia y la de la empresa como una oportunidad de aprendizaje y crecimiento personal.
En conclusión el cliente interno debe suministrar la información importante que nazca de su trato con los clientes externos y con los productos; con la finalidad de mejorar su trabajo, además también debe tener una visión de la empresa por lo cual debe saber el funcionamiento de todas las áreas.
Las empresas deben fomentar la importancia del cliente interno a la vez que recompensan su esfuerzo, este debe sentirse feliz y motivado, además de hacerlos sentir orgullosos por el producto ofrecen al cliente externo; por lo cual el cliente interno es una pieza importante que debe ser mantenida en un estado de felicidad y motivación.