
Pese a los avances tecnológicos los correos electrónicos siguen siendo una forma efectiva de comunicación con los usuarios de una marca. Sin embargo, hay que saber con qué frecuencia enviar emails a clientes para que no abrumarlos o causar que pierdan interés.
Conoce con qué frecuencias enviar emails a clientes
Debes saber que es muy difícil determinar una frecuencia exacta de envío de correos que resulte adecuada para todo tipo de clientes. Los públicos son diferentes y a algunos no les importa recibir contenido muy seguido, pero a otros sí.
Así que es importante que descubras la frecuencia con la que tu público se sienta cómodo y te genere los resultados que esperas. La frecuencia y también el número de correos enviados igualmente va a depender del tipo de campaña que realices o de los objetivos que quieres lograr.
Por ejemplo, los newsletter suelen enviar contenido semanal al cliente, a veces dos correos por semana. Pero es posible que otros prefieran que los contenidos le lleguen de forma quincenal o mensual.
La idea está clara, debes adaptarte a lo que quiere tu cliente, porque si no este tomará la decisión de desuscribirse y habrás perdido un cliente potencial. Entonces, ¿Cómo averiguar con qué frecuencia enviar emails a clientes?
1. Conoce a tu público
Primero lo primero, debes saber qué tipo de clientes tienes, cuáles son sus gustos y qué esperan de ti.
Recoger esos datos y utilizarlos para crear contenido de calidad es el primer paso para que ellos quieran recibir más emails. Asegúrate de no enviar correos por enviar, más bien, hazlo cuando haya una razón de peso y creas que surtirá un buen efecto; pero tampoco dejes pasar tanto tiempo que el cliente te olvide.
2. Haz pruebas a grupos segmentados
La mejor forma de encontrar la frecuencia adecuada es haciendo pruebas a varios grupos.
Intenta variar el número de correos o la frecuencia con la que los envías de forma sutil y ve cómo responden. No lo hagas con todos a la vez, separa por grupos y realiza distintas pruebas simultáneamente. Luego de un tiempo revisa los resultados y adáptate a ellos.
3. Haz encuestas
Si tienes cierta confianza con el cliente puedes enviar una pequeña encuesta de satisfacción donde preguntes, entre otras cosas, su frecuencia preferida de envíos.
Hacer preguntas directas te permitirá saber lo que el cliente opina sin filtros, y eso te ayudará mucho a mejorar. Eso sí, ofrece un incentivo o beneficio por responder a la encuesta, de lo contrario puede que muy pocos se animen a realizarla.
4. Sé oportuno
A veces no importa la frecuencia con la que envíes tus correos si el cliente no llega a leerlos porque se le pasó o está ocupado.
Si aprendes cuáles son los mejores días para enviar contenido es más probable que tu tasa de apertura aumente; y si tus contenidos son buenos eso podría generarte varias conversiones.
Como vemos, hay diversos métodos que puedes poner en práctica para descubrir lo que tus clientes quieren y satisfacer dicho deseo. No olvides que un software de automatización puede ayudarte a planificar el envío de correos más fácilmente.
Si pones en práctica estos consejos te aseguramos que más clientes te leerán y mejorarán tus resultados en poco tiempo.