Hay momentos de la vida en que te sientes con tanta energía, como si pudieras tocar el cielo con la mano; en cambio, en otros casos te sientes abrumado, cansado, que nada tiene sentido, que no quieres ni levantarte de la cama. Cuando eso sucede; ¿Cómo encontrar motivación para seguir adelante?
¿Por qué la motivación parece tan cambiante? ¿De qué depende? ¿Se puede controlar? Te invito a leer el presente artículo, para que encuentres las respuestas.
¿Qué es motivación?
Motivación, es el impulso que permite alcanzar las metas u objetivos, que te hayas propuesto en la vida; es la energía de la vida. Existen dos tipos de motivaciones: la motivación extrínseca, que surge de situaciones externas; y la motivación intrínseca, que surge de lo interno.
El comportamiento de las personas ha sido condicionado, socialmente, para responder a la motivación extrínseca, mediante premios y castigos. Pero esa fuente de motivación es muy inestable, porque depende de tu entorno, del mundo que te rodea; sobre el cual tienes muy poca influencia.
Cómo encontrar motivación
La verdadera fuente de motivación debe ser intrínseca, que es más sólida y eficiente; porque proviene de lo interno de tu ser, sale del corazón y alimenta todo tu cuerpo.
Encontrar motivación verdadera, implica desplazar la fuente de motivación desde lo extrínseco hacia lo intrínseco; para ello, debes elaborar y ejecutar un plan que comprenda los siguientes puntos:
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Establecer un propósito
Para establecer un propósito, lo primero que debes responder es, ¿Para qué trabajas o haces lo que haces? ¿Con qué objetivo actúas en la vida? Este tipo de interrogantes te ayudarán a encontrar tu propósito de vida y lo que verdaderamente te motiva.
Tienes que buscar un propósito de vida tan claro que ilumine todo tu ser. Que ocupe tu mente cada mañana al despertar, cada noche antes de dormir; una motivación, que te irradie de energía.
Si tu respuesta al “Para qué”, es tener un negocio exitoso, ser un vendedor excepcional, tener una idea revolucionaria que ayude a los demás. Has logrado un gran avance; la mayoría de las personas no logran llegar hasta allí.
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Debes actuar
Cuando tengas claro tu propósito, enfócate en actuar. Conocer el propósito es tu punto de referencia hacia donde deseas llegar para alcanzarlo, debes ponerte en acción.
En ese sentido debes mantenerte enfocado y orientar todas tus energías físicas y mentales en el objetivo y metas planteadas; no malgastes energías en cosas que te distraigan de tu objetivo.
Cuando te sientas desfallecido, reúne más energías; cuando sientes que caes, levántate con mayor ímpetu. Debes ser consciente que cuando decidiste lograr tus objetivos enfrentarías cosas difíciles para lograrlo.
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Mantenerte siempre optimista
Otra cosa importante para estar motivado es ser optimista. Siempre debes mirar el vaso medio lleno; es decir, ver las cosas desde el punto de vista positivo. El pensar en forma positiva atrae energías positivas que te permitirán aliviar los momentos de tensión y estrés.
Es recomendable que te rodees de personas optimistas; porque el optimismo, al igual que su contraparte, el pesimismo, se contagia.
Finalmente, una vez logradas tus metas actuales, deberás plantearte nuevas metas para mantenerte motivado. El ser humano es así; nunca estará conforme con lo logrado, siempre andará en la búsqueda de nuevos retos, nuevos desafíos. Así ha sido, así es y así seguirá siendo.
