
El acoso, la discriminación o la explotación laborales pueden convertir en veneno su empleo
Los ambientes tóxicos se encuentran a la orden del día en cualquier lugar, no se salvan ni las organizaciones, la agrupación de personas diversas y caracteres distintos en las organizaciones, permiten que germine la toxicidad en el ambiente, es inevitable, no se puede contener pero si se puede controlar.
Los trabajos tóxicos son tan nocivos como fumar. Por lo tanto, varios postulados han dedicado sus labores a proporcionar consejos, para sobrevivir y salir airosos de ciertas circunstancias laborales nocivas. Así como también, han permitido proporcionar estrategias para determinar por qué se puede llegar a sentir rechazo hacia nuestras labores cotidianas de trabajo.
¿Cómo reconocer un ambiente tóxico?
Reconocer ambientes tóxicos no es tan complicado, preguntémonos, ¿Cómo saber si su lugar de trabajo es o no tóxico? ¿Qué le pasa con su jefe o sus compañeros de trabajo? ¿Qué hacer ante ello?
Si realmente se hace estas preguntas, efectivamente puede estar ante un ambiente laboral tóxico. Ahora bien, mayor claridad permite conocer que respondería usted ante las siguientes preguntas, propuestas por el digital especializado Management-Issues. Cuestionario elaborado para diagnosticar con mayor veracidad la realidad del asunto:
- ¿Odia ir a trabajar todos los días?
- ¿Realiza el trabajo de dos o más personas, pero le pagan el mismo sueldo?
- ¿Se siente poco o nada valorado?
- ¿Su superior le grita a usted y a sus compañeros constantemente?
- ¿Ha pedido ayuda, pero nada cambia?
- ¿Le han pedido que falsifique informes?
- ¿Ha sido víctima de acoso sexual?
- ¿Fuiste en algún momento víctima de discriminación por motivos de raza, sexo, edad, religión o preferencia sexual?
- ¿Ha habido alguna vez violencia en el trabajo o alguien ha sido amenazado o robado?
Si alguna de sus respuestas fue positiva, te podemos confirmar que estas ante un ambiente tóxico. Esto puede afectar significativamente tu vida tanto personal como laboral. A su vez, podemos asumir que estas dirigido por personas de autoridad que centran su poder en el abuso, la no justicia y el desequilibrio organizacional. Viendo en conjunto todas esas cualidades negativas que engloban la organización, se vaticina, un posible desastre o declive. Esto llevaría a la organización a un quiebre generalizado, causando un grave descalabro interno a la empresa.
La solución no es renunciar
La firmeza y decisión, le proveerán una tabla de salvación ante esta situación, lo más recomendable es buscar las vías más directas, para hacerse entender. El utilizar métodos de comunicación efectivos, le permitirán voltear la situación y promover el cambio general de un ambiente nocivo toxicamente, a uno de productividad, concordia y entendimiento organizacional.
Una relación laboral enmarcada en el respeto y la consideración, garantiza el desarrollo productivo de la misma. Así como su crecimiento, el respeto a los canales de comunicación efectiva. Esto le permitirá hacer llegar sugerencias importantes para usted, que pueden permitir solucionar inconvenientes actuales. Manifestar de manera educada su irritabilidad cuando le ofenden comentarios poco propios de un entorno profesional. Dejar en claro que, el método de los gritos no llega a ningún lado. Ya que lejos de orientar aluden y deterioran aún más la relación laboral, promoviendo o acercando en quiebre de la relación laboral y porque no, la perdida de la empresa.
Recuerde también que si está sujeto a una situación en la que realiza el trabajo de dos por el sueldo de uno, es una posición a la que ha llegado previo consentimiento suyo. Si desde el primer momento no manifestó su desacuerdo, quejarse a posteriori es muy sencillo pero una actitud muy cómoda y poco profesional.
Ahora bien, si la comunicación sincera y efectiva no prospera. Debemos agotar hasta la última opción por lo tanto es recomendable aplicar las siguientes opciones:
- Los cambios de departamento o de lugar de trabajo siempre puede llegar a aliviar la situación. Otra opción es sugerir el cambio de tu jefe.
- Consiga un abogado para escribir una carta a su jefe, recursos humanos y el departamento legal. En ella vas a ir indicando que si la situación no cambia. Se va a presentar una demanda judicial por el ambiente hostil de trabajo. El acoso sexual, las condiciones inseguras, etc. Las empresas odian las demandas y la mala publicidad, y puede que así reaccionen.
- Si eso no funciona, presente una demanda judicial. Los testigos y compañeros de trabajo pueden respaldar su demanda para que ésta se convierta en una demanda colectiva.
- Póngase en contacto con un medio local o nacional, periodistas de investigación, estaciones de televisión y radio, periódicos, revistas e Internet. Que no son «solucionadores de problemas». pero pueden hacer un gran trabajo haciendo pública la irregularidad.
Y, si eso no funciona, es hora de buscar una buena compañía que respete a sus trabajadores y ábrase. No es necesario dejarse la vida en un empleo toxico. La factura a su salud es demasiado alta por algo que merece tan poco la pena.