Las técnicas de venta a domicilio y la venta puerta a puerta o «puerta fría»

Lo que se entiende por concepto de venta a domicilio y la venta puerta por puerta, es que el cliente no va al vendedor, sino que es el vendedor quien se dirige directamente a la casa del cliente con el objetivo de venderle un producto o servicio, sin que este haya pedido incluso ninguna información anticipada del producto o servicio que se le ofrezca. Es plantársele a una persona que no te conoce a ti ni a tu producto.

La venta a puerta fría se considera como una gran escuela donde se forjan los auténticos vendedores profesionales; ya que, supone no solo un aprendizaje en ventas sino que te enseña a como debes comportarte en diferentes escenarios que se te puedan presentar. En donde se presentan pruebas en muchos sentidos. Y por supuesto, te ayuda a perder la timidez, aprendes la importancia de conocer muy bien tu producto y también aprendes a contrarrestar las objeciones de esos posibles clientes. Por tanto, este método de venta sigue siendo considerado por muchas empresas como una vía de prospección comercial.

Por supuesto, para muchos vendedores, que cuentan con poca experiencia, la venta a puerta fría supone salir de su zona de comodidad, en donde se debe estar en contacto con la realidad de la calle, y donde pueden recibir cualquier tipo de respuesta. Sin embargo, aplicando las técnicas para la venta a puerta fría que te daré a continuación, vas a mejorar tus habilidades para vender a domicilio, sintiéndote más cómodo en el proceso.

 Técnicas para mejorar la venta a domicilio y la venta puerta a puerta

  • No temas al rechazo

Esta es la principal razón por la que muchas personas no les gustan las ventas y mucho menos a domicilio. Y es que, para muchos vendedores existe el temor a que les digan que “NO” y no quieren enfrentar esta situación. Pero el rechazo es tan inherente a las ventas como el éxito, no todas las personas te responderán de forma positiva y no todas estarán interesadas en lo que les ofreces; sin embrago eso no quiere decir que todas piense lo mismo. Así que, si no te atreves a enfrentar este temor lamentablemente no podrás crecer.

  • Ten un buen enfoque mental

La actitud mental es importante, y es la que define los resultados que tendrás al final del día. Si sales a vender con una actitud malhumorada y pesimista, tus resultados también reflejarán tu estado de ánimo, y por supuesto no vas a lograr vender. Ten un enfoque positivo, visualiza los resultados que deseas tener y siéntelo como una realidad. Eleva tu energía y entusiasmo y eso es lo que transmitirás a las personas.

  • Sé original

En el mundo comercial, muchas veces hay personas que ofrecen productos o servicios similares a los tuyos, y por supuesto tu no podrás cambiar sus características. Pero en lo que si puede incidir es en ti mismo y en tu originalidad. Se creativo y no copies lo que los demás hacen; recuerda, no todas las personas son iguales y todos tiene algo diferente que ofrecer. Confía en ti y haz que tus clientes encuentren algo diferente y original en tu producto.

  • Ten buena presencia.

La primera impresión siempre es importante, es lo primero que ve la persona al abrir su puerta. La forma de vestir, los gestos, la postura, provocan en la gente una impresión; recuerda, siempre es importante generar confianza en ti y luego en tu producto. Por eso cuidar de tu presencia va a generar una buena primera impresión en tu cliente, haciendo que muestre mayor receptividad.

  • Buen argumento

En todo momento ten un bien argumento diseñado. Definir tu objetivo y tener claro los beneficios que pueden aportar tu producto o servicio, te ayudaran a poder comunicarte mejor con las personas. También, es importante que tengas previsto las principales objeciones que te puedan hacer los posibles clientes, para que puedas contrarrestarlos, mostrando puntos importantes de tu producto; de esta forma, puedes evitar a toda costa esa famosa frase “no estoy interesado/a” y seguir adelante con la venta.

  • Ten una buena presentación

Prepara una breve introducción. Preséntate y muestra la razón por la cual estas visitando a la persona lo más preciso y claro posible, recuerda no hacerlas perder si tiempo. Muéstrate relajado y seguro de lo que les estas diciendo.