A día de hoy en el marco del competitivo mundo comercial actual, los usuarios se ven bombardeados diariamente con cientos de ofertas parecidas; muchas empresas intentan vender sus productos que no parecen diferenciarse de los de los demás. Este hecho hace que la creación de una propuesta de valor sobresaliente sea muy vital.
¿Qué debemos entender por propuesta de valor?
Una propuesta de valor es un texto descriptivo comercial que tiene como finalidad presentar y enumerar la oferta individual de una empresa. Su objetivo es hacer que el usuario conozca tu negocio, lo que ofrece y cuáles son los rasgos que lo diferencian de otras propuestas del mercado.
Implica comunicar beneficios y cualidades que permitan al consumidor elegir tu propuesta por sobre otras conociendo las ventajas de tu servicio.
Para hacer una propuesta de valor sobresaliente es necesario conocer bien los diferentes factores que convergen dentro del sector donde se realiza la actividad comercial.
La importancia de este recurso es que ayuda a aumentar el flujo de ventas, el reconocimiento de marca y a construir confianza entre el cliente y la empresa.
Pasos para crear una propuesta de valor sobresaliente
La creación de una propuesta de valor sobresaliente es un proceso que abarca al menos 4 aspectos fundamentales, que son:
- Analizar al buyer persona
- Identificar problemas del sector
- Analizar las propuestas de valor de la competencia
- Enumerar las ventajas de tu servicio
El primer paso implica analizar al buyer persona, es decir, a tu tipo de cliente ideal que estaría más dispuesto a comprar tu producto.
Es importante determinar quién es tu buyer persona, dónde está y cuáles son sus necesidades y requerimientos. Si tienes claro que es lo que ellos necesitan te será más fácil hacer una propuesta de valor que les resulte interesante.
La segunda fase abarca conocer los problemas que hay dentro del sector. Para ellos tienes que saber cuáles son los puntos que no se atienden bien y que podrían mejorar de cara a la satisfacción delos consumidores.
En este paso también puedes determinar cuáles de esos problemas o deseos del cliente dentro de tu sector resuelve tu marca.
La tercera fase implica mirar las propuestas de valor de otros, si las hubiera, para 1) ver qué ofrecen y 2) ofrecer una alternativa viable. No queremos que nuestra empresa se parezca a otras, queremos que destaque; por ello es importante conocer a quiénes nos enfrentamos y cómo sobresalir.
Con todo ese conocimiento pasamos a la última fase donde enumeramos las ventajas y beneficios de nuestra empresa en la propuesta de valor.
En ella debemos colocar qué nos hace diferentes del resto, cuáles son los beneficios de apostar por nuestro servicio y por qué deberían preferirnos. La propuesta de valor debe ser clara, concisa y directa, atendiendo puntos relevantes que no den lugar a la palabrería vana.
Ventajas de contar con una propuesta de valor
- Nos volvemos más competitivos
- Logramos destacar dentro de nuestro sector
- Ofrecemos soluciones a los problemas reales de nuestros clientes y nos ganamos su confianza.
- Gracias al reconocimiento de marca vendemos y fidelizamos más.
Si creas una propuesta de valor sobresaliente serás capaz de enfrentarte a los desafíos de la actividad comercial dentro de un sector competitivo. Así que manos a la obra.
