
Todos tenemos sueños y metas, a veces son ellos quienes dan sentido a nuestra vida, son el norte al que nos dirigimos cada que abrimos los ojos. Es el puerto al que necesitamos llegar en vida para sentirnos realizados como personas. Por ello, el cómo materializar tus metas es un tema tan importante.
Una vez tenemos nuestros sueños definidos, debemos trazar la ruta de metas que nos permitirán alcanzarlos primeros. Pero naturalmente suena más fácil decirlo que hacerlo, por ello en este breve artículo mencionaremos algunos elementos a tener en cuenta para consolidar nuestras metas.
Cómo materializar tus metas y no desfallecer en el intento
Algo que descubriste al crecer es una cosa que de niño ni se te pasaba por la cabeza: La vida es impredecible. La mayoría de las veces, las cosas no salen como planeamos. Hay un proverbio judío que dice algo similar a “El hombre planea y Dios se ríe”. Más de una vez nos sentiremos así durante la vida.
Así que, para materializar tus metas, deberías tener en consideración los siguientes puntos:
Tener metas realistas
Esto es algo evidente, pero no tan fácil de aceptar por muchos. Muchas de nuestras posibilidades están condicionadas por nuestro entorno. Entonces, una dosis de realidad para nuestras metas es lo más sano. Si difícilmente llegamos a fin de mes, es muy poco probable que lleguemos a la luna.
Es sano entender que no podremos conseguir algunas cosas en la vida, y por más que los gurús del wishful thinking (pensamiento iluso en español) te digan que puedes conseguir todo lo que te propongas; este pensamiento sólo conduce a decepciones al largo plazo.
Trabaja por tus metas
Nuevamente, es algo que es evidente pero que muchas personas no tienen en cuenta. Sueñas con ser un gran empresario, pero no te atreves a emprender. Sueñas con tener una familia feliz, pero no sabes como lidiar con tus relaciones interpersonales.
Por más que lo desees, tus metas no se van a cumplir mágicamente al levantarte de la cama un día. De hecho, cumplir tus metas es un proceso largo, de años y que requiere, por sobre todas las demás cosas, constancia.
Empieza por pequeños triunfos
Si tu sueño es ser el próximo Van Gogh, no ocurrirá que el segundo o tercer cuadro que pintes se venderá en una exposición en New York en una subasta millonaria. Y en el caso del arte, muchos conocieron la gloria y la fama póstumamente.
Quizá no puedas ser reconocido automáticamente como el nuevo Pierre Renoir, pero si empiezas vendiendo tus cuadros a conocidos, y te das a conocer en círculos locales, es un pequeño paso y logro, en tu camino a ser el artista del siglo; por ejemplo.
Hablando de Renoir, durante sus primeros años de pintor, vivió junto con el también famoso y exitoso pintor Claude O. Monet. Ambos tenían que elegir entre comer o comprar óleos y lienzos, eligiendo muchas veces lo primero. Así que debes recordar que hasta los pequeños logros requieren sacrificios.
Rodéate de personas beneficiosas para tus metas
Si tu meta consiste en bajar de peso, o romper alguna conducta nociva como beber alcohol en exceso o fumar; rodearte de personas que nunca hagan ejercicio, sean sedentarios en el primer caso o con estas conductas nocivas en el segundo, no es lo ideal.
Si te rodeas de personas con tus mismas metas, es más probable que aprendan mutuamente el uno del otro y que se apoyen en conseguir los objetivos que tengan.
Entonces, ya que sabes cómo materializar tus metas más fácilmente, es hora de que te pongas a trabajar sobre ellas, tomando en cuenta que nada ocurre sin dificultad y mucho menos de la noche en la mañana; y que luchar por nuestros sueños es un trabajo de tiempo completo y dedicación total.